miércoles, 29 de diciembre de 2010

Calor

A veces pienso que no hay peor tortura que el calor. Pero claro, casi siempre que pienso eso estoy trabajando, asique me digo que no, que la peor tortura es trabajar. Y así, divagando (para no tener que trabajar) llego a la conclusión obvia: la peor tortura es estar laburando con calor. Encima ahora me metieron en un sector en donde no hay un solo culo decente para distraerse un rato. Me cago en este casino de mierda.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No seas boludo, Esperanza, que cuando hace calor aparecen los escotes y las tetas sudadas.